Primera contribución y agradecimiento por la invitación
Al creador de OjO de buey le agradezco el haberme ofrecido participar en este blog donde, como en otros tantos, se habla de ese maravilloso mundo del que tanto nos gusta leer, escribir y debatir con indisumulada pasión. Siempre digo que la primera vez que comencé a ver las películas con otros ojos, distintos a los de un niño/adolescente que sólo buscaba en ellas el mero pasatiempo, fue tras el visionado de La lista de Schindler en una sala de cine. No soy nada original, pues supongo que la epifanía cinéfila le habrá llegada a más de uno por obra y gracia del maestro Spielberg. Por eso, quisiera recuperar una entrada de mi blog para esta primera y breve colaboración en OjO de buey. Suerte al creador del blog en su andadura.
Copio y pego el texto que escribí para prologar la secuencia y la adjunto a continuación:
Duración total del vídeo: 2:37 (la secuencia dura 2'22').
Copio y pego el texto que escribí para prologar la secuencia y la adjunto a continuación:
"Quizá sea una de las mejores películas de Spielberg. Recuerdo que, tras salir del cine, fue difícil quitármela de la cabeza. Me impactó tanto este duro relato del holocausto que mi percepción de aquel horror histórico cambió por completo. Era demasiado joven y, aunque hubiera estudiado esta salvajada en clase, el filme me dejó impresas muchas y duras imágenes.
Esta secuencia, una de las más aplaudidas del filme, me parece brillante. Poco he de decir para describirla, pues seguramente todos la tengan localizada en su memoria: una niña avanza por las calles de Berlín mientras los alemanes matan, golpean y expulsan a los judíos de sus casas para concentrarlos en el gheto. Spielberg quiere destacar (de ahí el color rosa del abrigo de la niña) que Schindler, hasta ahora un empresario abruptamente enriquecido gracias a la guerra, comienza a ser consciente de la barbarie de la que está sacando tajada. En definitiva, un buen juego de antagonismos: la inocencia de los niños frente a la peor cara del ser humano".
Duración total del vídeo: 2:37 (la secuencia dura 2'22').
Comentarios
No sin razón y por supuesto por lógica, descubriste el CINE con mayúsculas a través de Spielberg. Yo, que tengo diez años más que tú, también arribé a sus orillas en buena parte (los otros fragmentos son igualmente mágicos) gracias al mundo de este prestidigitador del celuloide. Sólo que cuando por entonces Spielberg agitaba su varita mágica creaba prodigios como EN BUSCA DEL ARCA PERDIDA (1981) o E.T. (1982). Más tarde descubriría que antes había realizado otros como la estupenda TIBURÓN (1975). Descubrí al Spielberg de temática "seria" (LA LISTA DE SCHINDLER, EL COLOR PÚRPURA) más tarde y sin duda igualmente me fascinó. Pero mi querencia está con el Spielberg de los géneros de aventuras y terror. Y poniendo en la báscula su filmografía me parece que ha dado al cine más obras maestras en estos géneros que en otros. Algunos críticos afirman que fue él y Lucas quienes inventaron el cine moderno como espectáculo. Incluso si analizamos con detenimiento LA LISTA DE SCHINDLER veremos que en ella hay numerosas escenas de auténtico terror (la entrada en los crematorios para lavarse o la escena en la que un desquiciado Ralph Fiennes dispara al azar sobre los judíos del campo).
No por ello carece de valor merecido el talento de este realizador para generar en torno a sus películas un aura de poesía y extraordinaria belleza. Aún así los referentes cinéfilos de Spielberg siguen siendo infantiles y de ellos ha alimentado su filmografía a mayor gloria de nosotros.
Seguiremos hablando de Spielberg, Matías. Da para alargar el carrete unos kilómetros más.
Nos vemos en el cine...
Como dices, seguiremos hablando del gran Spielberg y de otras muchas cosas más, pues el cine da siempre para mucho entre quienes nos gusta el cine.
Un saludo.
Bienvenido!
Para el espectador, entre una marea gris, ve de pronto una figura destacada, y por ende sabemos que Schindler también la ve, por primera vez , en lugar de tan sólo mirar.(Cuando la niña vuelve a aparecer subiendo una escalera sigue siendo en blanco y negro).Ahí es cuando empieza a cambiar.
Además,cuando vuelve a verla,esta ocasión siendo cadáver,la pureza y la vida se han visto manchadas: el color rojo está parcialmente cubierto por la tierra que mancha el abrigo de la niña muerta. Parece obvio que, dado lo que le ha ocurrido a la pequeña, Spielberg no puede dejar intacto el color de la figura; y lo mancha, lo “profana”.